Las travesuras del Melli Guillermo ya tienen forma de libro infantil

Presentaron en la Legislatura porteña Las aventuras del Mellizo Guillermo Barros Schelotto, escrito en idioma Braille para niños no videntes. Donan 1000 ejemplares para distribuirlos en bibliotecas y escuelas especiales.

Con un acto en la Legislatura porteña se presentó el libro infantil Las aventuras del Mellizo Guillermo Barros Schelotto, escrito en idioma Braille para no videntes. El título forma parte de la colección Pelota de Papel –que cuenta con el asesoramiento del periodista deportivo Alejandro Fabbri–, de la editorial Párrafo Aparte, que donó a la Biblioteca Argentina para Ciegos 1000 ejemplares para distribuir en forma gratuita, entre más de 100 escuelas de educación especial y bibliotecas para no videntes de todo el país.

El diputado Oscar Moscariello encabezó el encuentro, acompañado por el diputado Alejandro García, autor de la iniciativa, y la directora de la Biblioteca..., Olga Graciela Torres Morell. En octubre pasado, la Legislatura porteña declaró de Interés Cultural la colección, ya que “apunta a capitalizar la pasión por el deporte y traducirla en una excusa para estimular la lectura en los más chicos”.

El Melli, que acaba de dejar el Columbus Crew de la Major League Soccer de los Estados Unidos y ahora es pretendido por el club que lo vio crecer, Gimnasia y Esgrima de La Plata, resaltó la iniciativa que lo tiene como protagonista. “Es poco habitual que se piense en las personas con dificultades, y ojalá que este tipo de iniciativas dejen de ser sólo iniciativas y se conviertan en obligaciones de la sociedad, para profundizar la igualdad de oportunidades”, sostuvo el ex delantero de Boca Juniors.

Por su parte, el autor del libro, Daniel Roncoli, destacó el “espíritu amateur” con el que fue concebida su obra, al considerar que “no busca fines comerciales y es por eso que se pudo destinar, con fondos propios, esta serie de ejemplares para los no videntes” y el doble objetivo de introducir a los niños en la lectura e inculcar “que el rival no es un enemigo, sino simplemente un adversario ocasional dentro de un juego”.